domingo, 30 de marzo de 2014

Vicálvaro - Colmenar


El sábado por la noche habíamos decidido no salir porque iba a llover mucho. Vale, ¡pero por qué haremos caso al hombre del tiempo! Me levanto tarde, y con el cambio de hora, más tarde aún. Decido salir, aunque sea al carril, porque la semana de confraternización franco-española que se ha celebrado en mi casa me está poniendo redondo.


Ya no merece la pena avisar a nadie. A estas horas, las 11 de la mañana, muchos domingos estaríamos regresando. Digo en casa que voy a llegar tarde y, dicho y hecho, ¡hasta Colmenar, que no hay sitio más cerca!

domingo, 23 de marzo de 2014

Un paseo por la Casa de Campo


Últimamente frecuentamos mucho este gran parque madrileño, pero es que, aparte de que mola mazo, es la única forma de que Javi acceda a salir con el grupo. También hemos quedado allí con Sergio, en el aparcamiento del lago, porque aunque parezca mentira, no conoce el lado betetero de la CdC.


Y sin más, acicalados para la ocasión y a la hora convenida, nos disponemos a recorrer algunos de los senderos más disfrutones que tenemos en nuestro repertorio: la tubería, el cerro de Garabitas, los peraltes, el Arroyo de la Zorra,... y para casa a llenar el bonobici.

Y el track (otra vez con incidencias):

domingo, 16 de marzo de 2014

La Jarosa pedrolera


En estos días de buen tiempo, y mientras dure, estamos intentando tocar todos los palos. Hoy toca piedras. Y en La Jarosa las hay, y bien gordas. A la cita acudimos sólo el grupo de Vicálvaro y antes de las 9 ya estamos desempaquetando junto al muro de la presa. La mañana está espléndida, con una luz increíble y una temperatura primaveral que ¡vamos, como para quedarse en casa!


Pero no todo iba a ser bueno. Resulta que al navegante se le han olvidado las pilas del gps -cosas de la edad, seguro- y tendremos que hacer la ruta de memoria. Aunque no es mucho problema porque la cosa está clara: primero subir a lo más alto y luego bajar hasta el embalse siguiendo las piedrecitas. No tiene pérdida.

Como es norma habitual en la casa, empezamos subiendo, y bien. Las primeras rampas por asfalto son durillas y rápidamente entramos en calor. A la altura de Las Encinillas dejamos la pista por la derecha. Vamos a subir por lo difícil, aunque al principio el ascenso es más suave. Sin embargo, tras un cerrado giro a izquierdas el camino se empina de verdad, con tramos sostenidos al 20% hasta llegar a la Pista de la Mina, que nos conduce, ya sin tanto desnivel, al collado del mismo nombre.


Del Collado de la Mina, a la izquierda, sale la trialera que sube al Refugio de la Salamanca. Piedras suficientemente grandes y estratégicamente separadas como para que se te encaje la rueda delantera, vegetación cerrada y neveros helados.

Nieve en la subida al Cerro de la Salamanca
El refugio está concurrido; dejamos las bicis y trepamos a las piedras que coronan el cerro para tener visión de las dos vertientes. Espectacular.

Y después del receso, lo dicho: pedrolerío de todas clases y colores, aderezado con una pendiente importante, sobre todo en la parte que da acceso a la pista de La Jarosa. Luego ya, en la segunda mitad del descenso, las piedras van dejando paso poco a poco a una senda más amigable que nos deposita directamente en el bar del área recreativa.

Aquí más fotos.

Y el track (dibujado, pero fiel al recorrido):


domingo, 9 de marzo de 2014

El Cerro de la Torrecilla


Ya era hora, por fin. Parecía que no iba a llegar nunca. Lo que se ha hecho de rogar. El buen tiempo, se entiende. Hoy nos da igual el lugar, con tal de que se llegue alto para perder la vista en el horizonte... Y aunque ya conocemos la zona del Pontón, nunca habíamos subido a lo más alto. ¡Váaaamonos!

Comenzamos fuerte. Nada más cruzar la carretera tomamos el GR-10 para bordear el Cerro de la Oliva. Espectacular empedrado natural con las rampas más duras y técnicas de toda la jornada. Luego descendemos hasta el cauce del Lozoya, y remontamos el serpenteante río hasta la Presa de la Parra.

La Presa de la Parra
Tras cruzar el desprendimiento -ya no hay que escalar- y salir a la pista nos metemos en faena. Por delante 10km de subida en los que se ganan 700m de altura. Pero estamos mentalizados. Hoy la idea es esa. Subir, subir y subir. Durante la ascensión sólo un par de paradas, lo justo para dejar constancia gráfica de las estupendas vistas.

A los pies del Cerro de la Torrecilla, el punto más alto de la ruta
La bajada promete ser rápida. La pista está en bastante buen estado pero, ¡ojo!, en algunos tramos está anegada de agua, que aflora por cualquier sitio. Enseguida llegamos al llano y tras un momento de indecisión conseguimos dirigir nuestras bicis hacia Alpedrete de la Sierra por el GR-10, que por aquí es una mezcla de agua, barro, hierba y piedras, todo a partes iguales.

El Pontón de la Oliva
Y para el final lo más feote. Teníamos previsto visitar las cárcavas naturales y bajar al Pontón por trialera, pero se nos hace tarde y regresamos a los coches por la pista del Canal Alto del Jarama, 8 km de toboganes que a estas alturas de ruta no molan nada, nada. ¡Aaaadiós!

¡Un beso!
Todas las fotos tras el click.

Y el track:

domingo, 2 de marzo de 2014

Vicálvaro - El Pardo


Hoy salimos con más miedo que vergüenza pues el pronóstico meteorológico anuncia lluvia a partir de las 11 horas. Decidimos llegarnos hasta El Pardo, para evitar el tan manido carril de San Martín, esperando que el barro (su ausencia, se entiende) nos permita disfrutar de alguno de los senderillos tan divertidos de la zona.



Pues nada. AVC, PLM (donde recogemos a Javi) y por Madrid Río enlazamos con la Senda Real, que discurre paralela a la M30 hasta encontrar de nuevo el AVC a la altura del Puente de San Fernando. Entramos al Monte de El Pardo por la cuesta del campo de golf y arriba encontramos algo de barro muy resbaladizo, que desaparece cuando la cosa se pone para abajo.

Intentamos buscar algún sendero nuevo pero equivocamos el sentido y volvemos al recorrido clásico. Cuando miramos el cuenta llevamos más de 30km. Es hora de darse la vuelta. El regreso lo hacemos por la CdC y el AVC. En la A42 Javi tira hacia Getafe y los dos Jesuses continuamos por el carril hasta Vicálvaro.