domingo, 17 de abril de 2011

Vicálvaro - Sanchinarro


Este fin de semana prevacacional mis compañeros de fatigas me han dejado solo. Así que salida facilita la de hoy, por el carril, sin rumbo fijo y a ver qué pasa. Por los senderos detrás del polideportivo llego al parque de Vicálvaro y por sus pasarelas enlazo con el AVC y tomo a la derecha hacia La Peineta. Esta zona del estadio sigue en lo que parece su estado natural en los últimos años: obras perpetuas. ¿Alguien sabe hasta cuándo?

A la altura de las cocheras de la EMT veo que han quitado las vallas en el acceso a la zona de Valdebebas y para allá que me voy, pensando en enlazar de alguna manera con el parque Juan Carlos I a través de la ciudad deportiva del RMD. Sin embargo nada más cruzar la M-40 vuelve a estar todo cortado y el carril me redirige al anillo un poco más abajo.


Abandono el carril buscando los senderitos sobre los cerros artificiales. Hay un par de cuestas a las que les tengo ganas. Pero en el momento de la verdad aborto a mitad de la primera y no me atrevo con la segunda (ni con la tercera más "fácil"). El cerebro ha tomado el mando de las operaciones y ya se sabe, ¡cuando se piensan las cosas!... Habrá que venir acompañado la próxima vez (o apargar las neuronas por un rato).

Ya en Valdebernardo me acuerdo de los escalones que bajan al centro de mantenimiento del parque y a por ellos que voy. He estado toqueteando en la horquilla y me transmite tal confianza que me permito el lujo de soltar los frenos en el tramo final. ¡Cómo "traga" la jodía!

2 comentarios:

  1. La próxima vez, o te tiras solito o te tiramos y luego recogemos lo que haya que recoger.

    El miedo es pasajero y la gloria para siempre.

    Javi

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  2. Por eso decía lo de venir acompañado, para la patada en el culo ...

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